domingo, 25 de mayo de 2008

El ombligo del mundo...

Bueno, aquí estamos otra vez...

Aisss... cada vez tardo más en volver a escribir. ¿Será que mi cerebro se vuelve vago? ¿Dejadez? ¿Falta de disciplina?
La verdad es que pienso que esto de llevar un blog es un poco ombligismo condescendiente... "yo escribo porque me gusta, lo hago por mí, no para otros... si quieren leerlo allá ellos, pero no les necesito para nada..."
Bah, aunque fuese cierto, entonces, ¿porqué hacerlo en un lugar público? ¿acaso estoy queriendo fomentar el vouyerismo?
Me temo que en lo más profundo siempre buscas un poco de compañía, aunque sea ficticia, de ahí el hablar solo, el escribir cartas a alguien que nunca las recibe (en el caso de que sea una persona real nunca las envías, si hombre, y que opine luego y te decepcione... nonoono, se quedan en el cajón donde secretamente esperan la revisión anual de secretos y cosas varias).

Mmmmm... quizás ahora que tengo mi propio ordenador personal mantenga el blog más en orden y de forma continuada postee, no lo sé. Sólo espero no convertirme en una vieja de esas que ya no habla más que con fantasmas.

Resulta que ahora mismo me encuentro en una situación vital un tanto... ¿desconcertante? Se me presenta la posibilidad de mejoras sustanciales tanto económicas como de calidad de vida... Os ruego me digáis, si es claro que es así, el porqué de este aferramiento a un hierro candente (bueno, ya no tanto) que no parece darme nada más que un poco de libertad mental que por otro lado entiendo también como impuesta y falsa. Siesque, será cierto que cuando la vida es simple nos gusta complicarnos la existencia de mala manera.
El viernes por la tarde sólo pensaba en lo bonito de mi nuevo ordenador, en unas vacaciones que se me vienen encima y que dependen de solucionar algún asuntillo menor, en qué bonito sería tener hijos y en la última peli de Indiana Jones (que por cierto se merece un post que voy a tener que hacer a continuación).
Pues bien, ahora mismo, siendo domingo al mediodía (horario siestil) ya me véis con el melón totalmente entretenido en cosas como contar mi vida por internet.

Lo que yo digo, ombliguismo básico desenfrenado.

En fin, en el fondo sé lo que debo hacer..., supongo...
ojalá me encontrara una frase clara y concisa en la sopa de letras que dijera:
"Haz esto, mendrugo" o algo así.

Libre albedrío... vaya timo.

Agradeciemntos: Esta imagen pertenece a www.mandolux.com. Gracias.

2 comentarios:

Estepa Grisa dijo...

pues yo también profeso el ombliguismo, cuando se empieza es casi necesario.


pd. "xnyvwvvg" algun dia voy a errar con lo de la verificacion de la palabreja esta y voy a empezar a pensar que en verdad soy una plancha o un secador o que se yo, una nevera de esas con conexión a internet que te compran sin que te enteres.

Pablo dijo...

Cuando se publica deja de ser ombliguismo. Aún con la apariencia de escribirse a uno mismo, el ciclo se abre y se vuelve manifestación.